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100% NoticiasEl preso político Félix Maradiaga, uno de los siete aspirantes presidenciales detenidos por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo ha perdido más de 50 libras de peso corporal en las cárceles de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), conocidas como el nuevo Chipote.
“Félix en total ha perdido 50 libras, por lo que se ve delgado. Sin embargo, eso le ha ayudado a mejorar la situación de su presión arterial. Dice que está orando mucho y que Dios está sosteniéndole”, denunció la UNAB mediante un comunicado.
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La Unidad Nacional Azul y Blanco informó que después de 45 días de estar incomunicado, la hermana de Félix Maradiaga y su esposo fueron a verlo luego que las autoridades les informaron de visita especial.
“Félix está de buen ánimo, fuerte espiritualmente. Mantienen intacto su convicción y compromiso por Nicaragua”, detalló la UNAB.
Sin sábanas
La organización política también denunció que los carceleros mantienen en la oscuridad a Maradiaga y no le han permitido el ingreso de sábanas o frazadas para protegerse del potente frío, principalmente de las heladas propias de la temporada navideña.
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“Las condiciones no han cambiado: su celda sigue en penumbras, recibe sol cada 8 días por 10 minutos. No le han permitido tener con que cubrirse (sábanas o frazadas”, se lee en el documento.
La UNAB también denunció que las torturas sicológicas hacia Félix Maradiaga continúan con amplios y extensos interrogatorios que “cada vez se vuelven más repetitivos”.
De acuerdo con la Unidad Nacional Azul y Blanco, el politólogo Félix Maradiaga, quien gozaba de amplio respaldo popular ante una posible candidatura, ha solicitado una Biblia, por lo que su familia espera que en la próxima visita las autoridades la permitan ingresar. “Aunque es poco probable”, añade el comunicado.
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El pasado primero de enero, la oficialista radio La Primerísima, publicó unas fotografías en donde aparecen los familiares de presos políticos sentados en la recepción de la Dirección de Auxilio Judicial, conocida como el nuevo Chipote, en donde esperan turno para ver a sus familiares.
Durante esta cuarta visita de los familiares a los presos políticos, verificarán el estado de salud de los suyos, principalmente la familia de Ana Margarita Vigil y Tamara Dávila, dirigente de Unamos, principalmente de esta última porque en días pasados se conoció que un oficial de “alto rango” en estado de ebriedad y cegado por el fanatismo a Daniel Ortega y Rosario Murillo ingresó a la celda y agredió brutalmente a Vijil, creando zozobra entre su familia.
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